El branding no es solo la apariencia de una marca, también es su personalidad; en el branding se definen la filosofía y los valores que transmite una marca, la hace reconocible, se crea su identidad y una conexión directa con la mente y el corazón de tus consumidores.
Imagina a un gran comediante en el escenario para presentar su último monólogo; pues su estilo único, ese tono de voz inconfundible, su expresión corporal, el como cuenta la historia; todo ello genera el deleite de su público. ¡Es su sello personal lo que engancha a la audiencia, dando lugar a las carcajadas!